Montevideo, 17 de agosto de 1987
Sr. Jefe del Grupo de Aviación de Caza Nº 2
May.(Av) Dn. Edgardo Menéndez
Estimado Jefe y amigo:
Con mucho gusto traté de recopilar todos los que Ud. me pide en su atenta carta. Han transcurrido muchos años, desde que fui Jefe del Grupo de Caza Nº 2. Pero, haciendo memoria, leyendo las libretas de Anotaciones Personales y en las carpetas de Vuelo de la época tratada, en libretas personales etc. fui encontrando cada uno de los puntos que interesan a su objetivo.
Indudablemente es con mucho cariño que se recuerdan hechos de la actividad cumplida, en nuestra muy querida y glorioso Grupo de Aviación de Caza Nº 2. Tarea siempre sofisticada, a veces con dolor por los tristes hechos ocurridos, a queridos Oficiales, que lamentablemente se perdieron en las duras jornadas que hoy los recordamos con cariño.
Pero, la vida continúa y ella es la que realmente levanta nuestros deseos de seguir adelante, en ese hermoso y siempre cada vez más querido de volar un avión de Caza.
Amigo May. Menéndez, todo mi deseo es que la haya servido en algo y por supuesto estoy siempre a las órdenes para cualquier solicitud, con mucha suerte y extienda mis saludos a todo el Personal del Grupo de Aviación Nº 2 (Caza).
A su digna orden y con atentos saludos
Cnel. (Av) Humberto Bía
Punto Nº 8 – Fotos, documentos y objetos.
Estas fotos tomadas en el año 1954 son de la actividad diaria de vuelo del Grupo de Caza Nº 2.
En ese año teníamos normalmente 15 F-51 en orden de vuelo. De los 25 aviones F-51 que trajimos en vuelo desde Los Ángeles – USA en 1950 (diciembre), cuatro años después, se redujeron a un número que en orden de vuelo diario fluctuaba próximo a los 15 aviones, permaneciendo varios en reparación o en inspección de rutina.
Punto Nº 2 y Nº 4 – Actividad de un día de trabajo y de vuelo de la Unidad.
Tengo muy presente un hecho que se produjo en el transcurso del año 1955 y que dio origen a una actividad de vuelo diaria sumamente intensa en el Grupo de Aviación de Caza Nº 2.
El desafío surgió del Jefe de Vuelos de la Misión Americana acreditado en la Base Nº 1 y que se informaba de la actividad diaria del Grupo de Aviación de Caza Nº 2 integrado con aviones F-51. Me sugirió que si el Grupo llegaba a cumplir más de 4000 horas de vuelo en el año en curso (1955) con los F-51, se comprometía a gestionar en la USAF los aviones F-80 y T-33 para la dotación del Grupo en el próximo año 1956.
Magnífica oportunidad de tener el entonces codiciados F-80 y T-33.
Se resolvió de inmediato aceptar el desafío y programar la actividad diaria de vuelo en los meses finales del año (1955) buscando iniciar las primeras misiones de vuelo en F-5 a las 6 de la mañana.
Los señores Oficiales pilotos de la 1ª Escuadrilla, decolaban a las 6 de la mañana para efectuar ejercicios de Tiro y Bombardeo en la Isla 7 del lago del Rincón del Bonete.
Cuando llegaban al Grupo los otros Oficiales, a las 8 de la mañana, la 1ª Escuadrilla ya estaba aterrizando en la Base Nº 1. De inmediato salía la 2ª Escuadrilla con igual misión de vuelo de la 1ª Escuadrilla. Mientras los primeros que salieron a las 6 de la mañana preparaban nuevamente los F-51 (abastecimiento, armamento, etc.); trabajo este vigilado por los señores Oficiales Pilotos constatando que las ametralladoras punto 50, la ametralladora fotográfica estuvieran cargadas y en seguro.
Así era el vuelo durante el día, manteniendo el cumplimiento del programa del Grupo.